La Revelación que Sacude los Pilares de la Justicia: ¿Aforamiento o Responsabilidad?
El Inicio de un Proceso Judicial Sensible
Un tribunal de la capital española ha emprendido acciones para solicitar al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) detalles sobre la situación administrativa de José Ramón Navarro, quien previamente presidió la Audiencia Nacional. Esta solicitud es crucial para confirmar si el exmagistrado aún mantiene su condición de aforado, un factor determinante para la competencia del juzgado en la investigación de una querella por presunta revelación de secretos. La información filtrada, según trascendió, alertó al Gobierno sobre la absolución del líder de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluís Trapero, meses antes de que se hiciera pública.
La Querella y el Cuestionamiento del Aforamiento
La organización Hazte Oír presentó una querella por el delito de revelación de secretos, que ha sido admitida a trámite por el Juzgado de Instrucción número 4. El primer paso del juzgado ha sido verificar si Navarro conserva su aforamiento, lo que determinará si el caso puede ser tramitado por un tribunal ordinario. Cabe destacar que el aforamiento, que protege a los presidentes de la Audiencia Nacional ante el Tribunal Supremo, cesa al finalizar el mandato.
El Fin del Aforamiento y la Competencia Ordinaria
El Tribunal Supremo desestimó una querella previa al confirmar que Navarro ya no ocupaba su cargo y se encontraba en situación de excedencia voluntaria desde el 1 de abril, fecha en que concluyó su periodo de 11 años al frente de la Audiencia Nacional. Esta condición implica la pérdida del aforamiento inherente a los jueces en activo, permitiendo que la investigación sea llevada a cabo por un juzgado común. A pesar de que esta información es de dominio público y figura en el Boletín Oficial del Estado (BOE), el magistrado instructor, Marcelino Sexmero, ha requerido una certificación oficial al CGPJ sobre la situación actual de Navarro.
La Cronología de una Revelación Polémica
Según informes periodísticos, el 15 de agosto de 2020, Navarro envió un mensaje al entonces ministro de Transportes, José Luis Ábalos, anticipando la absolución de Trapero. Este mensaje fue reenviado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Posteriormente, el 30 de septiembre, Navarro actualizó a Ábalos sobre la inminente publicación de la noticia en los medios. La sentencia absolutoria de Trapero fue notificada el 20 de octubre. El propio ex presidente de la Audiencia Nacional ha reconocido haber enviado los mensajes, aunque sin recordar los detalles debido al tiempo transcurrido.
El Deber de Sigilo y las Consecuencias Legales
La querella de Hazte Oír argumenta que Navarro, en su rol de presidente de la Audiencia Nacional, divulgó de manera anticipada información reservada sobre un fallo judicial de gran importancia, infringiendo así el deber de sigilo establecido por la Ley Orgánica del Poder Judicial y el principio de independencia judicial. La asociación ha solicitado la incautación de los mensajes y la comparecencia de Navarro en calidad de investigado, así como de Ábalos y Sánchez como testigos, para esclarecer los hechos.